Punto visible

Mis ojos se detienen en un punto visible, 
puro, aunque oculto para otra mirada. 

Mi pensamiento se distrae, 
viaja a pasados que se adoran, 
a un presente que me abandona en un beso,
a un abrazo que avisa una despedida.

Mi mano se abstiene de moverse, 
de romper una distancia, 
de sostenerse en aquellas 
que no sean las que tienes tú. 

Cada vez que veía mi reflejo
en tus pupilas, sentía que 
empezaban a nacer dentro de mí 
unos gusanos de seda.

Mirando el cielo estrellado, te espero.

Mis ojos se detienen en un punto visible, 
puro, aunque oculto para otra mirada.
Mis ojos se detienen ante el vuelo
que le da sentido a unas alas.

Pero de nada sirve ya esperar 
que unos gusanos de seda 
sufran la metamorfosis 
de la bella mariposa 
dentro de mi estómago………
absolutamente de nada.


                                (12 de Abril de 2004)